La canción describe un típico domingo en el oeste montevideano donde la parsimonia del fin de semana se ve interrumpida por los campeonatos de ciclismo y sus circuitos urbanos. Cabrera canta
"Pasacalles de largada los boliches de Garzón hirviendo en presagios y apuestas. Caramañolas, morral de la fiereza. Corazones que explotan de tanto bombear"
Canção:
El viento en la cara
Álbum:
El viento en la cara
Selo:
Ayuí/Tacuabé
Selo:
1987